Algunos estudios llevados a cabo en ciertos huesos humanos prehistóricos, dan cuenta de la existencia de la artritis desde hace unos 500.000 años.
Esta patología se caracteriza por la inflamación de la sinovial, que es la membrana sutil que recubre los cartílagos de los huesos, para protegerlos de los roces que se presentan en todo movimiento articular.
Se trata de una patología dolorosa e incapacitante (hasta para los movimientos cotidianos más usuales) pero, por fortuna, contamos con un excelente producto: el Bioxtron.
En qué consiste realmente la artritis
Además de las características ya mencionadas, tenemos que se trata de una enfermedad autoinmune crónica.
Para ser más explícitos y específicos, digamos que cuando la sinovial es atacada por células dañinas, de un lado, o cuando segrega demasiado líquido, de otra parte, el sistema inmunitario reacciona.
Pero, lo complejo del caso radica en que nuestro sistema inmune no reconoce las células de los tejidos del cartílago y, por ende, las ataca también.
Las partes del cuerpo que se suelen ver más afectadas por esta dolencia son las manos, los hombros, los codos y las rodillas.
En la gran mayoría de los casos, se ven afectados ambos lados del cuerpo, de tal manera que si, por ejemplo, se afecta una rodilla, la de la otra pierna también se verá afectada.
Algunos de los efectos (algo extraños realmente) de la artritis, aparte de los que se dan en las articulaciones, se pueden presentar en los ojos, pulmones y corazón.
Algunas veces afecta, además, a la piel sobre todo la que recubre las articulaciones atacadas por esta enfermedad crónica e incurable.
Si bien el Bioxtron no cura la artritis, también es cierto que alivia ostensiblemente sus dolorosos síntomas.
Esta enfermedad no distingue edades, de tal manera que puede aparecer en niños y adolescentes. Pero, lo más usual es que se presente entre los 40 y los 60 años de edad.
Tenemos, además, que los estudios más recientes dan cuenta del hecho de que las mujeres son tres veces más tendientes a padecer de artritis.
En lo que respecta a la sintomatología de la artritis reumatoidea, digamos que pueden aparecer gradualmente o de manera súbita y repentina.
Los beneficios del Bioxtron para tratar la artritis reumatoidea
Para conocer los beneficios de este producto que, dicho sea de paso, no presenta efectos secundarios, es preciso saber más acerca de la compleja sintomatología, en detalle.
Los síntomas más comunes son el dolor en las articulaciones, la inflamación de estas, la dificultad para moverlas o la presencia de nudillos por debajo de la piel que recubre la articulación.
Además, se pueden observar malformaciones articulares, inflamación de los ganglios linfáticos (en cuello e ingle, más que todo), sequedad en ojos y boca y, en algunos casos, fiebre.
Veamos, entonces, cómo opera este producto 100 % natural. En primera instancia, digamos que se obtiene de un alga verdaderamente “milagrosa”.
Llamada por muchos una “súper-alga”, esta planta marina dispone de unos fotoquímicos que inducen a la médula ósea a producir CÉLULAS MADRE ADULTAS.
Acto seguido (por decirlo de alguna manera), conduce esas CMA al torrente sanguíneo el que, de su parte, las lleva a los tejidos del cuerpo estropeados que necesitan renovación.
A la hora, más o menos, de haberse ingerido este producto ya se están liberando las CÉLULAS MADRE ADULTAS.
Entonces: estas acuden, para el caso de la artritis, a los cartílagos de las articulaciones y, más específicamente, a la sinovial que es la membrana delgada que recubre dichos cartílagos.
Y, dado su alto poder regenerativo, mejora considerablemente la arquitectura del tejido dañado. Es así, como alivia radicalmente la sintomatología de esta dolorosa e incapacitante enfermedad.

Esta es la manera, pues, como el Bioxtron beneficia a los pacientes con artritis. Es útil, además, para un sinnúmero de dolencias.